5 consejos para elegir el mejor collar para tu perro
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Nuestras recomendaciones para elegir un collar para tu perro: 1. Collar de nailon (de preferencia acolchado y con tela transpirable). |
El collar, es uno de los accesorios “obligatorios” que debemos tener cuando gozamos de la compañía de un perro, especialmente cuando vivimos en la ciudad. Es un elemento de seguridad para nuestro amigo de cuatro patas, ya que, si lo acompañamos con una correa, nos facilitará el trabajo de mantenerlo seguro durante los paseos o los traslados, por ejemplo, cuando vamos a la clínica veterinaria. Además, cualquier persona que encuentra a un perro con collar, entiende que éste tiene casa y familia que puede estar buscándolo. Sin embargo, en el mercado existe una gran variedad de collares para perro y en ocasiones, encontrar el collar perfecto para nuestro amigo puede representar un verdadero reto. Antes de continuar con el artículo debes saber que no es recomendable salir a pasear con tu perro con collar y correa, ya que el riesgo de lesionarlo es alto, el uso principal del collar es el de portar la identificación y datos de contacto de tu amigo (para saber más lee este otro artículo).
El collar es un elemento de seguridad imprescindible para nuestro amigo de cuatro patas.
En internet podrás encontrar muchos artículos sobre este tema, por eso nosotros no te cansaremos con un “tratado” sobre el tema, sino que iremos directamente a nuestras recomendaciones:
1. Material de fabricación. Collares de nailon. Aunque son muchos los materiales que se utilizan para fabricar los collares para perros, nosotros preferimos los de nailon, especialmente si están acolchados y tienen algún forro transpirable. Los collares de piel pueden ser más bonitos y también son una buena opción; sin embargo, el nailon es más fácil de lavar, es más suave y más cómodo para que tu perro lo lleve puesto siempre. Además, los collares de nailon pueden ser más atractivos por la gran cantidad de diseños y colores que podemos encontrar.
El collar debe ser lo suficientemente cómodo para que tu perro pueda llevarlo todo el día.
2. Elementos de seguridad. Tiras reflejantes. No podemos olvidar que el collar es un elemento de seguridad para nuestro perro. Por lo tanto, es muy recomendable que el collar cuente con tiras reflejantes que sirvan para verlo en la oscuridad. También hay en el mercado collares con iluminación led; estos podrían ser una buena opción, pero estos collares deben encenderse y mantener las baterías con suficiente carga. Piensa que, en un caso de emergencia, por ejemplo, que nuestro perro se pierda durante el día, si nadie encendió el collar, llegada la noche no representará ninguna ventaja.
3. Ancho adecuado. Ancho adecuado para raza y tamaño. Es algo que muchas veces pasa desapercibido (sobre todo para las personas que empiezan en el mundo perruno), pero en ocasiones, los collares más económicos son muy angostos (por eso son más baratos) y esto puede resultar incómodo e incluso peligroso para nuestro perro, sobretodo si salimos a pasear, ya que puede llegar a lastimar su cuello. Por ello, es importante revisar el ancho del collar, hay algunos fabricantes que incluso ensanchan el collar en áreas estratégicas para reducir el riesgo de estas lesiones. Aquí es importante repetir que cualquier collar, cuando se usa con correa, puede causar lesiones en tu perro (para saber más sobre esto leer aquí), por eso, una excelente opción es contar, además de con el collar, con un arnés para tu perro, éstos son muy recomendables sobretodo para perros inquietos que suelen tirar mucho de la correa. Yo vivo con dos beagles, y el arnés es, con diferencia, la mejor opción.
Algunas razas de perros necesitan collares específicos.
4. Tipo de broche o hebilla. Hebillas de liberación lateral ajustables. Este es el tipo de hebilla más utilizada en los collares de perro, y no es de extrañar, ya que es muy fácil de poner y quitar, pero también es muy resistente a la tracción. Éstas pueden ser de plástico o de metal. Ya es una cuestión de gustos. Nosotros preferimos las de plástico. En nuestra experiencia, las de metal, al ser más pesadas, terminan girando el collar de tal forma que la hebilla queda “colgando”, por lo que nuestro amigo siempre lleva ese peso innecesario, al estar sentado, al comer o beber, incluso cuando se acuesta, lo hace sobre el broche. Un consejo extra referente al broche, es buscar que éste tenga una “funda protectora”, o bien, que cierre sobre el propio collar, es decir, que el broche no vaya directamente sobre la piel o pelo, así será más difícil pellizcar a tu perro cuando pongas y quites el collar.
Es importante que nuestro amigo siempre lleve los datos de contacto.
5. Información de contacto. Que permita integrar datos de contacto. Por último, es importante considerar que el collar debe tener los datos de contacto de alguna forma. La más fácil es agregar una placa con esta información, así que para esto es importante considerar también el ancho del collar, ya que, si es muy ancho, necesitaremos argollas muy grandes y podría resultar incómodo para tu perro. Cada vez hay más opciones, en algunos collares se puede bordar o imprimir esta información. Asimismo, estos datos pueden grabarse en el propio broche del collar. Algunos collares cuentan con un espacio interior para escribir esta información, esta es una buena opción, aunque la consideramos accesoria, ya que es probable que con el uso termine por caerse la etiqueta o emborronarse la información, dificultando su lectura.
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Artículo por C. Antonio Ríos Saldaña. Antonio es un apasionado de los perros, el café y las actividades al aire libre (como salir a remar con su kayak). Es cofundador y director de BioCórima, una asociación civil, sin fines de lucro, dedicada a la conservación de la biodiversidad, a través de la investigación científica y la educación ambiental. Antonio es Ingeniero Forestal con maestría y doctorado en ecología y manejo de fauna silvestre. Como investigador, ha recibido el nombramiento de “Investigador Nacional” del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (2014-2019) y el “Reconocimiento a la Excelencia en el Desarrollo Profesional” de la Universidad Autónoma de Nuevo León (2017).
Créditos fotográficos por orden de aparición: AbstractDesigns, Caleb Stokes, Louise Aikman, Artem Sapegin y Niki Sanders, todos en Unsplash.